Las mujeres y juventudes son clave en diversas fases de la red de valor pesquera, como en el procesamiento del producto, la comercialización, el monitoreo y la vigilancia comunitaria. Sin embargo, aún queda camino por recorrer para lograr que se reconozca y valore el papel fundamental que desempeñan en el sector pesquero. Uno de los grandes retos que se tiene en este sentido es la necesidad de visibilizar sus saberes, capacidades y habilidades como oportunidades para conseguir comunidades resilientes y océanos saludables.
Una forma de afrontar este reto es el acercar la innovación, la tecnología y la educación digital de forma inclusiva a estos grupos (juventudes y mujeres), ya que ello puede resultar en: soluciones creativas, empoderamiento colectivo y reconocimiento sobre sus derechos.
No obstante, en nuestro país el acceso digital para todas y todos todavía está lejos de ser una realidad. Las personas en las comunidades pesqueras se enfrentan a una significativa brecha digital principalmente en tres puntos. El primero por el limitado acceso a internet, principalmente en área rurales; el segundo, por la falta de equipos (celulares, tabletas o computadoras) para acceder a lo digital; y, el tercero el bajo conocimiento en el uso de aplicaciones, programas, herramientas y páginas que pueden significar un beneficio para el trabajo del sector y la comunicación con otros sectores.
En este último aspecto, y enmarcado en el Día Internacional de la Mujer: “Por un mundo digital inclusivo: Innovación y tecnología para la igualdad de género” diversas organizaciones pesqueras y de la sociedad civil se han unido para co-crear esfuerzos que acorten la brecha digital de género y permitan incorporar a las mujeres en los espacios digitales, brindándoles acceso a la información con la finalidad de empoderar a las personas que integran la red de valor pesquera y creen soluciones locales que favorezcan el desarrollo de sus actividades diarias.
Los avances tecnológicos ofrecen un sinnúmero de oportunidades para enfrentar diversidad de problemáticas tanto económicas, sociales y ambientales, así que el lograr un acceso a tecnología inclusiva y transformadora y a educación digital resulta fundamental para contribuir al logro de iniciativas globales, tales como: Los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030, las Directrices voluntarias para lograr la sostenibilidad de la pesca en pequeña escala en el contexto de la seguridad alimentaria y la erradicación de la pobreza, y al pilar de Igualdad y equidad de género del Año Internacional de la Pesca y Acuicultura Artesanales.
Las redes sociales han empoderado a las mujeres de sector pesquero al ser un espacio para expresarse, ser escuchadas, compartir experiencias y retos a los que se enfrentan en la pesca y conservación de recursos, y dar difusión a las buenas prácticas pesqueras. Además, la tecnología facilita el trabajo desde mejorar procesos administrativos hasta contribuir a la seguridad en el mar, les permite reducir tiempos para encontrar áreas de pesca, conocer las condiciones ambientales que se tendrán para el día de pesca y dar seguimiento a inventarios, pagos y gastos.
Desde COBI impulsamos que la actual y la próxima generación de personas que se dedican a la actividad pesquera utilicen y compartan su conocimiento para diseñar e implementar soluciones y que logren comunidades costeras resilientes y océanos saludables desde la colaboración y la participación efectiva, informada e igualitaria. De igual forma promovemos el desarrollo de tecnologías con responsabilidad social y ecológica, así como su uso como PescaData, para visibilizar a las juventudes y mujeres garantizando su empoderamiento, el fortalecimiento de sus capacidades, y la creación de oportunidades de trabajo decente a través de la tecnología.